El vóley mi gran pasión
Dos años has tardado en volver a la cancha. Dos años en los que algunas veces has creído que no volverías a hacerlo nunca más. Dos años de médicos que te decían que esa rodilla no tenía solución, sintiéndote impotente por no poder hacer nada y llorando hasta tener los ojos hinchados.
Para mí han sido dos años en los que los primeros meses no sabía qué hacer. No sabía como podía consolarte ni qué podía decirte, así que solo me quedaba mirar la cara que tenías cunado nos ibas a ver jugar a un partido.
Solo una cosa tenía clara, te echaría mucho de menos en la cancha, echaría de menos que me consolaras, que nos dieses tu fuerza, que nos hicieses seguir adelante y que levantáramos la cabeza cuando ya nosotras nos habíamos rendido.
Pero al fin llegó el día en el que te iban a operar, por fin iban a arreglar esa rodilla después de varios meses de negativas, pero claro, cuando parecía que todo iba a ir bien, llegó el miedo. El miedo de hacerte otra lesión así. Y así volviste a pasar un año.

No hay comentarios:
Publicar un comentario